TOP 🔝👉 Daniel Peris (@DanielPeris en Twitter / X) al desnudo (no literal)
¿Conoces a ese tipo de personas que después de 10 minutos de reunión te cargan las pilas y te pones a hacer cosas? Pues ese es Dani.
Emprendedor 24/7 que no para de hacer y proponer nuevas cosas a cualquier día y hora. Lo mismo recibo un WhatsApp suyo proponiendo acciones de marketing un sábado por la noche que un jueves antes de que entre a hacer su clase de CrossFit.
Y esto es así porque emprender le da la vida, como a mí y, muy probablemente, a ti que estas leyendo esto también.
En todos estos años Dani no ha parado; montó un blog muy TOP llamado iPadizate que luego vendió por mucho dinero, lanzó su SaaS para Apps, herramientas de analítica web, tiene una agencia, PICKASO, que va como un tiro, y muchas más cosas que te va a contar él hoy aquí, en su TOP al desnudo.
Solo me ha costado un año y medio convencerlo de que la haga, pero la espera ha merecido la pena.
Te dejo con él y no te olvides de seguirlo en X y comentarle qué te ha parecido por allí 😜
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Quizás me conoces de Twitter y mis juegos de palabras absurdos. O quizás no... Tengo 40 años, estoy muy felizmente casado y soy padre de un niño precioso que tiene ahora casi 4 meses. Vivo en un pueblo cerca de Barcelona, soy 100% autodidacta, me dedico a "hacer cosas" en Internet (y me ENCANTA) desde hace mucho (MUCHO) tiempo y te voy a contar mi vida. Resumida, porque en caso contrario este contenido sería muy largo y tú no dedicarías tu valioso tiempo en leerlo para conocerme un poco más / mejor.
Coca-Cola, ordenadores, programar
Es importante saber hacía donde vamos, pero también de donde venimos.
Me encanta la Coca-Cola y me encantan los ordenadores. Siempre he vivido rodeado de ordenadores (lucky me!) y siempre me ha gustado "hacer cosas" con ellos. Cuando nací (1983) mi padre tenía un ordenador en casa. Era éste:
Después de ese ordenador llegaron otros: algún otro Sinclair, algunos Amstrad, algún Commodore (incluido el Amiga 500 que fue mi primer ordenador propio en 1990), pero cuando tenía 3-4 años y no sabía leer ni escribir un día mis padres me vieron tocando el siguiente ordenador:
Cuál fue su sorpresa cuando vieron lo que había escrito en pantalla:
cocacola
La culpa fue de esta "placa" que colgaba de la pared del despacho de mi padre:
¿Cómo? Nadie lo sabe, pero imagino que, simplemente, me fijé en cada letra que aparecía en la placa, las busqué en el teclado del ordenador y las pulsé en el mismo orden en el que aparecían. Imité lo que tantas veces había visto hacer a mi padre, Paco: escribir en el ordenador. ¿Por qué lo hice? Ni idea, aunque imagino también que querría probar la Coca-Cola, cosa que no sucedió hasta bastantes años después.
Me juego un chupito contigo a que no conoces a mucha gente cuyos padres se llaman Paco y Paca, ¿verdad? Pues así es. Paco y Paca 😍
Mis padres eran funcionarios (ahora están jubilados), pero mi padre, que nunca se dedicó profesionalmente a nada relacionado con la informática, fue el primer "friki" (en el mejor de los sentidos) que conocí. Ordenadores, electrónica, mecánica, carpintería... Mi padre podía montar cualquier cosa y arreglar cualquier cosa, desde un coche hasta una TV. MacGyver era un aficionado a su lado. En serio. Y si mi padre no sabía hacer algo... Se ponía y lo hacía.
Salvo error por mi parte, no tengo antecedentes "emprendedores" en mi familia.
Hasta 1990 me gustó mucho jugar con el ordenador, con la NES y en los salones recreativos (😍), pero casi más que jugar me FLIPABA ver cómo estaban hechos los juegos: el sonido, la música, los gráficos, las animaciones... ALUCINABA con eso (y sigo haciéndolo). Y un día, cuando tenía 8-9 años, pensé que quería hacer juegos para ordenador. Si había gente por ahí que los estaba haciendo, yo también quería de eso. Yo quería hacer juegos.
"- Papá, quiero hacer juegos para ordenador"
"- Para eso tienes que entender cómo funcionan los ordenadores y aprender a programar... Aquí tienes un montón de libros. Te recomiendo que empieces por BASIC."
Mi padre tenía un armario lleno de libros "muy extraños": BASIC, C, Pascal, Turbo C, QuickBasic... ¿Qué era todo aquello? 🤔
¿Y sabes que hice?
Pues me puse a leer y a hacer cosas con esos libros y con los ordenadores que había por casa, cada día, cada rato que podía. Me puse a programar. ¿Y sabes cómo aprendí a programar? PROGRAMANDO. Leyendo, picando código, cagándola, entendiendo... Así una y otra vez, una y otra vez, una y otra vez, una y otra vez... Programé de todo: hasta virus.
Jugaba, montaba / desmontaba, programaba, diseñaba... Hacía de todo con ordenadores. Y programar me hacía MUY FELIZ. Crear me hacía MUY FELIZ.
¿Mi padre me dejaba hacer todo eso cuando yo quería? NO... Solo cuando ya había terminado los deberes del cole y había terminado sus hojas de operaciones matemáticas: mi padre me ponía folios con operaciones (sumas, restas, multiplicaciones y divisiones) y el reto era resolverlas mentalmente en el menor tiempo posible. ¡Me lo pasaba pipa con eso! 🤓
Y entonces, en 1995, un día mi padre llegó a casa y dijo "He puesto Internet en casa y he comprado un libro de HTML".
¿Internet? ¿HTML? ¿Qué es eso?
Internet, los estudios, primeros negocios
El concepto de Internet hizo que me estallara la cabeza; fue parecido a cuando miro al cielo una noche estrellada, me abstraigo y pienso en la inmensidad del universo (no sé tú, pero yo podría estar días enteros así)... PODÍA HACER COSAS (páginas web) y cualquier persona de cualquier lugar del mundo podía acceder a ellas y verlas... MARAVILLOSO.
"Daniel, para hacer páginas web tienes que aprender HTML, es parecido a programar..."
Así que cogí el libro de HTML y me lo leí. E hice una página web (de mierda) en la que recuerdo perfectamente que sonaba música MIDI de fondo. Después de esa página vinieron muchas más, pero mejor no me adelanto a los acontecimientos. Y sí, una de las primeras cosas que hice en Internet fue una página web.
Era un coñazo escribir HTML a mano, la verdad. Así que me abrí Visual Basic y me monté un editor de HTML. Muy básico (IMG, A, negritas, cursivas, imagen de fondo... no había mucho más jaja), pero así me ahorraba escribir cada tag y también me ahorraba los posibles errores en tags, rutas de archivos, etc.
Se llamaba "CutrePage". Recordar este nombre me ha generado un pensamiento muy feliz. Además de crear cosas, me encanta ponerles nombre. Una cosa sin nombre es una "cosa" sin más, una cosa sin terminar. Una cosa con nombre es poesía; una cosa con nombre es fantasía.
Salvo en algunas (muy) contadas ocasiones en las que me motivé mucho en el colegio, instituto y universidad, nunca fui un buen estudiante (papá y mamá: lo siento). Suspendía casi todas las asignaturas y en bastantes ocasiones me expulsaron de clase por estar hablando, molestando, distraído (me pasaba las clases dibujando cosas o escribiendo código a mano) o por preguntar demasiado... La cosa es que al final lo aprobaba todo, hasta la prueba de selectividad. Después de eso, entre tumbos varios, empecé 3 carreras diferentes y no terminé ninguna. Aquello no era lo mío... En cualquier caso, siempre me gustó (y me gusta) mucho MUCHO leer y dibujar. Devoraba cualquier libro que cayera en mis manos y cualquier revista Muy Interesante.
Ahora bien, ganaba dinero en el colegio. ¿Cómo? Haciendo trabajos para los demás (Internet) y cobrando por ello. También ganaba algunas pesetas (no había euros) "haciendo copias de seguridad" de juegos de PlayStation, pero esta historia la contaré en otro momento.
Me gustaba mucho jugar al Counter Strike y, misteriosamente, tenía en mi poder los usuarios y contraseñas de muchos clientes de muchos cybercafés de Valencia, por lo que yo nunca pagaba... Esto quizás lo cuente también en otro momento 😜
Por no alargarme mucho más en este bloque, entre finales de los 90 y principios de los 2000 seguí aprendiendo mucho de Internet, monté muchas páginas web (ocio nocturno en valencia, Counter Strike, etc.), hackeé algunas cosillas, crackeé otras tantas y empecé a ganar dinero haciendo páginas web para otros.
Trabajé de DJ, de diseñador gráfico, de mozo de almacén, vendiendo juegos de sábanas en El Corte Inglés...